Si te encuentras en Bogotá y quieres planes para conectarte con la naturaleza, los parques naturales en Cundinamarca son la mejor opción. Lugares en donde podrás respirar aire puro y podrás observar paisajes únicos y muy naturales. No necesitas viajar tan lejos de Bogotá para ir a lugares hermosos, así que aquí te vamos a contar cuáles son los mejores parques naturales en Cundinamarca para que te programes y los visites todos.
Parques Naturales en Cundinamarca
Cundinamarca alberga una variedad impresionante de Parques Naturales que cautivan tanto a locales como a visitantes. Cada uno de estos espacios ofrece una ventana a la biodiversidad única de Colombia y a paisajes que van desde páramos altiplánicos hasta densas selvas tropicales. Estos parques no solo son refugios de flora y fauna endémicas, sino también escenarios ideales para el ecoturismo y la investigación científica, destacando por su importancia ambiental y cultural en la región. (Lee también: Turismo en la Catedral de Sal de Zipaquirá)
1. Parque Natural Quininí
El Parque Natural Quininí se extiende sobre una superficie de aproximadamente 3.800 hectáreas. Este parque se caracteriza por su diversidad biológica excepcional, albergando una gran variedad de especies de flora y fauna propias de los ecosistemas andinos. En términos de flora, se pueden encontrar especies emblemáticas como el roble andino, el arrayán, y diversas especies de orquídeas que adornan el paisaje con su belleza y colorido.
En cuanto a la fauna, el Parque Natural Quininí ofrece hábitat para especies como el oso de anteojos, el venado cola blanca, el tigrillo y una variedad de aves endémicas y migratorias que encuentran refugio en sus bosques. Este parque es también crucial para la conservación de especies amenazadas y para mantener los servicios ecosistémicos que benefician a las comunidades locales.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Natural Quininí están orientadas principalmente al ecoturismo y la educación ambiental. Los visitantes pueden disfrutar de caminatas guiadas por senderos interpretativos que atraviesan diferentes tipos de vegetación, así como avistamiento de aves y fotografía de paisajes naturales impresionantes.
Además, el parque ofrece oportunidades para el camping y la práctica del senderismo, permitiendo a los visitantes sumergirse completamente en la naturaleza virgen de los Andes colombianos.
En términos de accesibilidad, el Parque Natural Quininí se encuentra a aproximadamente dos horas de Bogotá, en Tibacuy a 87 kilómetros de Bogotá lo que lo convierte en una escapada ideal para aquellos que desean explorar la biodiversidad andina sin alejarse demasiado de la ciudad.
Las condiciones climáticas varían según la altitud, por lo que es recomendable estar preparado para cambios rápidos de temperatura y condiciones meteorológicas. Con su rica diversidad biológica y sus paisajes impresionantes, el Parque Natural Quininí se posiciona como un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y la aventura en Colombia.
2. Parque Chicaque
Se trata de una reserva natural privada, que se dedica a la conservación del medio ambiente, al ecoturismo y a la educación medio ambiental. Es un lugar hermoso que te recomendamos mucho visitar, se encuentra solo a 30 minutos de Bogotá.
En el Parque Chicaque es un bosque de niebla de 300 hectáreas, de las cuales, 10 kilómetros son senderos ecológicos en los que puedes observar vegetación nativa que está en vía de extinción, hermosos nacimientos de aguas puras, preciosas quebradas cristalinas y escaleras de piedra que construyeron los indígenas.
Entre las especies vegetales más destacadas se encuentran robles, arrayanes, musgos y líquenes que crecen en un entorno húmedo y fresco gracias a las neblinas que envuelven constantemente la zona.
En términos de fauna, el Parque Chicaque es hogar de especies como el oso de anteojos, el venado cola blanca, el puma y diversas aves como el tucán andino, el águila y el colibrí. Estas especies conviven en un hábitat bien conservado que ofrece refugio y protección dentro de su red de senderos y áreas protegidas.
Los visitantes del Parque Natural Chicaque pueden disfrutar de una amplia gama de actividades ecoturísticas y recreativas. Los senderos bien mantenidos permiten caminatas de diferentes niveles de dificultad, ideales para observar la flora y fauna local mientras se atraviesan cascadas, quebradas y bosques primarios. Además, el parque ofrece zonas para picnic, miradores panorámicos con vistas impresionantes del Valle de Tequendama, y opciones para acampar y disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza.
3. Parque Chingaza
Si vas a este lugar, prepárate para disfrutar de varios climas, va desde los 800 msnm a los 4.020 msnm, así que el parque tiene clima cálido, templado, frío y de páramo. Este Parque Nacional Natural Chingaza es un tesoro natural ubicado en los departamentos de Cundinamarca y Meta, al oriente de Bogotá.
Con una extensión de más de 76.000 hectáreas, este parque se destaca por su biodiversidad única y sus ecosistemas de páramo y bosque altoandino. En términos de flora, alberga especies emblemáticas como el frailejón, el cual es crucial para la regulación hídrica de la región, así como musgos, líquenes y una variedad de plantas adaptadas a las condiciones extremas de altitud y clima.
La fauna de Chingaza es igualmente impresionante, con especies como el oso de anteojos, el cóndor andino, el venado cola blanca y numerosas especies de aves endémicas y migratorias. El parque es vital para la conservación de estos animales y sus hábitats, contribuyendo significativamente a la protección de la biodiversidad en los Andes colombianos.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Nacional Natural Chingaza incluyen senderismo, observación de aves, camping y actividades educativas sobre la conservación ambiental. Los visitantes pueden explorar una red de senderos que atraviesan paisajes impresionantes, lagunas cristalinas y bosques nublados, proporcionando experiencias inolvidables para los amantes de la naturaleza y la fotografía.
Chingaza se encuentra a aproximadamente 50 kilómetros al este de Bogotá, con acceso principal desde los municipios de La Calera y Choachí. Su proximidad a la capital colombiana lo convierte en un destino popular para excursiones de un día o escapadas de fin de semana, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de sumergirse en uno de los ecosistemas más importantes y hermosos del país.
4. Parque Nacional Natural Sumapaz
El páramo de Sumapaz se encuentra a tan solo 30 minutos de Bogotá. Se considera como una fábrica de agua y una maravilla natural del mundo. Es el lugar perfecto para disfrutar del aire puro y de las especies que solo nacen en este lugar debido a su altura.
El Parque Nacional Natural Sumapaz es reconocido como la mayor área protegida de páramo en el mundo, abarcando más de 300mil hectáreas. Este vasto ecosistema alberga una biodiversidad única de flora y fauna adaptada a las condiciones extremas de altitud y clima frío característicos de los páramos andinos. Entre las especies vegetales más destacadas se encuentran el frailejó, icónica planta que cumple un rol crucial en la regulación hídrica de la región, así como especies de musgos, líquenes y otras plantas adaptadas a la alta montaña.
En cuanto a la fauna, Sumapaz es hogar de especies emblemáticas como el cóndor andino, el oso de anteojos, el venado cola blanca, y diversas especies de aves como el colibrí paramuno y la perdiz de páramo. Estas especies encuentran refugio en los extensos páramos y bosques de niebla del parque, contribuyendo a su conservación y preservación.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Nacional Natural Sumapaz incluyen caminatas guiadas por senderos interpretativos que permiten explorar los diferentes ecosistemas del páramo, observación de aves, fotografía de paisajes naturales impresionantes, y camping en áreas designadas. Los visitantes pueden disfrutar de la serenidad y la majestuosidad de los paisajes andinos, así como aprender sobre la importancia de conservar estos ecosistemas únicos.
Sumapaz se encuentra aproximadamente a 50 kilómetros al sur de Bogotá, con acceso desde localidades como Pasca y Fusagasugá.
5. Parque Arqueológico Piedras del Tunjo
Se encuentra en el municipio de Facatativá, muy cerca de Bogotá, a tan solo 40 kilómetros, es un lugar muy interesante para visitar, con importancia histórica y natural. El Parque Arqueológico Piedras del Tunjo destaca por sus yacimientos arqueológicos que datan de la época precolombina, donde se pueden encontrar petroglifos y vestigios de la cultura muisca, quienes habitaron la región antes de la llegada de los conquistadores españoles. Además de su valor histórico, Piedras del Tunjo cuenta con una biodiversidad notable que incluye especies de flora y fauna adaptadas a los ecosistemas de la sabana de Bogotá.
En cuanto a flora, el parque alberga especies típicas de la vegetación de la sabana como el guayacán (Tabebuia rosea), el mortiño (Vaccinium meridionale), y árboles de diferentes tipos. La fauna también es variada e incluye aves como el búho y el carpintero, mamíferos pequeños como el zorro y el conejo, así como reptiles y anfibios que habitan en los cuerpos de agua cercanos.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Arqueológico Piedras del Tunjo incluyen visitas guiadas para conocer los vestigios arqueológicos y aprender sobre la historia de los muiscas, caminatas por senderos que atraviesan el paisaje natural y observación de aves. Además, el parque cuenta con áreas de picnic y zonas de descanso donde los visitantes pueden disfrutar de un día al aire libre en un entorno cultural y natural fascinante.
Ubicado a solo 40 kilómetros al noroeste de Bogotá, Piedras del Tunjo es de fácil acceso desde la capital colombiana y se presenta como un destino ideal tanto para excursionistas interesados en la arqueología como para familias que buscan combinar educación y recreación en un entorno natural privilegiado.
6. Parque Pionono: El Balcón de Cundinamarca
El Parque Natural Pionono, situado en el municipio de Sopó, es conocido por su singular formación rocosa que se asemeja a un gran pan de azúcar, siendo un hito natural emblemático en la región. Este parque ofrece un ambiente rico en biodiversidad, con una variedad de especies de flora y fauna propias de los ecosistemas andinos y de bosque seco tropical que lo caracterizan.
En términos de flora, Pionono alberga especies como el cedro, el roble, el arrayán y diferentes tipos de cactáceas que crecen entre las grietas de las rocas. La fauna incluye aves como el colibrí, el búho y el pájaro carpintero, así como mamíferos pequeños como el zorro y el conejo, que encuentran refugio en los bosques y matorrales del parque.
Las actividades que se pueden disfrutar en el Parque Pionono incluyen senderismo por sus numerosos senderos que ofrecen vistas panorámicas del valle de Sopó y los alrededores, así como escalada en roca para los entusiastas de la aventura. Además, el parque cuenta con zonas para picnic y áreas designadas para acampar, lo que lo convierte en un destino ideal para escapadas de día o fines de semana en contacto con la naturaleza.
Ubicado a aproximadamente 40 kilómetros al norte de Bogotá, Pionono es de fácil acceso desde la capital colombiana y es popular entre los lugareños y turistas que buscan explorar paisajes naturales impresionantes y realizar actividades al aire libre en un entorno tranquilo y pintoresco.
7. El Parque Natural La Chorrera
Se ubica en el municipio de Choachí, es reconocido por albergar la cascada más alta de Colombia y una de las más impresionantes de América del Sur, con una caída de agua de aproximadamente 590 metros. Este parque se encuentra inmerso en un entorno de bosques húmedos y montañas que conforman el paisaje de la vertiente oriental de la Cordillera Oriental de los Andes colombianos.
En términos de biodiversidad, La Chorrera ofrece una rica variedad de flora que incluye especies como el roble, el cedro, el nogal, y diversas especies de orquídeas que adornan los senderos con su belleza y colorido. En cuanto a fauna, el parque es hábitat de aves como el tucán andino, el águila, y mamíferos como el venado cola blanca y el oso de anteojos, especies que encuentran refugio en sus densos bosques.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Natural La Chorrera están orientadas principalmente al ecoturismo y la aventura. Los visitantes pueden disfrutar de caminatas guiadas por senderos que conducen a la cascada, donde pueden observar la flora y fauna nativa mientras se maravillan con las vistas panorámicas del paisaje montañoso. Además, el parque ofrece áreas para picnic y opciones para acampar, brindando la oportunidad de disfrutar de una experiencia completa en contacto con la naturaleza.
La Chorrera se encuentra a aproximadamente 45 kilómetros al sureste de Bogotá, con acceso desde la carretera que conduce a Choachí. Su proximidad a la capital colombiana lo convierte en un destino popular para excursiones de un día o escapadas de fin de semana, atrayendo tanto a locales como a turistas que buscan explorar una de las cascadas más espectaculares y paisajes naturales impresionantes de Colombia.
8. Parque Natural Laguna de Fúquene
Este parque natural se ubica en el departamento de Cundinamarca, es un importante humedal de agua dulce en Colombia que abarca aproximadamente 12.000 hectáreas. Este ecosistema es crucial para la conservación de aves acuáticas migratorias y residentes, así como para la biodiversidad de flora y fauna asociada a los humedales. Entre las especies de aves que se pueden observar se encuentran el pato zambullidor, la garza real, el gallito de agua y varias especies de patos migratorios.
En términos de flora, la Laguna de Fúquene sustenta una variedad de vegetación acuática y ribereña, incluyendo totoras, juncos y diversas especies de plantas acuáticas que son hábitat y fuente de alimento para la fauna del lugar. El parque también alberga especies de mamíferos como el zorro, la nutria y el oso hormiguero, que complementan la rica biodiversidad del ecosistema.
Las actividades que se pueden realizar en el Parque Natural Laguna de Fúquene incluyen observación de aves, paseos en bote por la laguna para apreciar la vida silvestre desde cerca, caminatas guiadas por senderos interpretativos que rodean el humedal, y fotografía de paisajes naturales impresionantes. Además, el parque ofrece áreas para picnic y zonas de descanso, permitiendo a los visitantes disfrutar de un día tranquilo en contacto con la naturaleza.
Ubicado a aproximadamente 80 kilómetros al norte de Bogotá, con acceso desde municipios cercanos como Ubaté y Fúquene, el Parque Natural Laguna de Fúquene es un destino ideal para los amantes de la ornitología y la biodiversidad acuática, ofreciendo una experiencia enriquecedora en uno de los humedales más importantes y hermosos de Colombia.
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